23 de octubre de 2011

Stardust

Viajando desde El Muro hasta Stromhold con luz de vela


¿Somos humanos porque vemos las estrellas o vemos las estrellas porque somos humanos? Con esta aparentemente sencilla pregunta inicia la historia de Stardust, una interpretación libre de la novela Homónima de Neil Gaiman  que nos lleva a la Inglaterra del siglo XIX para conocer al joven Tristan Thorn y descubrir la historia de cómo se convirtió en un hombre.  Además, lo acompañaremos en el viaje que lo llevará a dejar El Muro (pueblo donde vive) y adentrarse en el reino de Stromhold en busca de una estrella fugaz para su amada Victoria.

Debo confesar que cuando vi esta película hace 4 años, fue porque no había algo más "interesante" en cartelera y no tendría idea de si sería buena, pero me dije a mi misma que si Robert De Niro y Michelle Pfeiffer habían puesto su fe en ella, bien podría hacer yo lo mismo. ¡menos mal que lo hice! porque se convirtió en una de mis películas favoritas.


En esta cinta hay de todo, humor y acción; piratas en barcos voladores que cazan rayos, una princesa raptada por una malvada bruja, brujas aún más malvadas dispuestas a todo por conseguir el corazón de la estrella, príncipes ambiciosos en busca de un collar que los convertirá en el próximo monarca, fantasmas atados a la tierra mientras no se sepa quién será el nuevo rey de Stormhold y un sinfín de otros personajes tan dispares como los anteriores.


De igual forma cuenta con una magnifica banda sonora realizada por el británico Ilan Eshkeri donde se muestran 21 composiciones que te pasean por todas las etapas del film, atrapándote en la trama completamente, dejándote pegado al asiento y sintiendo como vibra cada nota dentro de ti. El nivel de finura y exquisitez de la música es indescriptible, pues la misma es tan mágica como la película. A título personal diría que las mejores canciones son “Shooting Star” y “Coronation” pues le imprimen aún más dramatismo a dos momentos claves de la trama presentándonos a Yvaine (la estrella fugaz) en uno y el otro muestra la coronación del nuevo rey de Stromhold; sin embargo, todas las piezas son sublimes y etéreas, alcanzando un nivel de perfección casi doloroso que puede sentirse aún más en “Tristan e Yvaine” donde la sección de cuerdas de la orquesta hace una labor majestuosa. No puedo dejar de mencionar además “Pirate Fight”, no solo porque la música es sensacional sino porque hay cosas que no tienen precio en la vida, y ver a Robert De Niro en ese momento es una de ellas.


Stardust es una película para soñar, para reír y para emocionar. Está llena de personajes amigos y de magia, dejándote con la sensación de que el amor puede encontrarse en cualquier lugar y el deseo de compartir una vela de "bubulina" con alguien más.



A Gabriel
Porque siempre recordaremos a Tristan e Yvaine

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