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| Imagen tomada de acá |
Una (o mejor dicho) gran parte de mi ser odió la asignación del reto fotográfico pautada para el 5to día; esto se debe a que significaba pensar en todas las cosas que me entristece ver en mi país y que día a día veo con mucha preocupación como están cada vez más arraigadas y ya forman parte de nuestra "cultura", se trataba pues, de fotografiar el bananerismo criollo.
La cosa no estuvo fácil, y no precisamente por falta de ejemplos. Y eso es lo más triste del caso, que pensé en muchas cosas que podría fotografiar para cumplir con la tarea del día, pero no quería hacerlo. Mi mente divagó ante la idea de fotografiar dólares, gasolina, prótesis, uñas acrílicas y antenas de directv; sin embargo, me decidí por un "lujo" en el que soy culpable y algo de lo que me siento orgullosa -lamentablemente-, hablo del acaparamiento, de ese placer que se siente llegar al supermercado y encontrarte con que hay harina PAN, azúcar, café, pollo o mantequilla. No todo al mismo tiempo, claro (de lo contrario no sería tercermundo) y llevarte 4 kilos, hablo de enviarle mensajes a tus tías avisándoles que ya llegó la harina y guardándole 2 paquetes de leche a la vecina que la otra vez te guardó uno de azúcar.
Ver aceite en un supermercado es como una aparición, es un fenómeno extraño de repetición incierta y que debe aprovecharse mientras se pueda. Por ello sentimos placer al acaparar productos en casa y eso es lo que quise reflejar. Es un lujo poder tener más de 10 de cualquiera de estos ítems en tu casa y es tercermundista tener que hacerlo por aquello de "más vale prevenir que lamentar". Así que con Uds. Mazeite "El Iluminado".
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| Día 5: Un lujo tercermundista |
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